Esta madrugada, habitantes de la ciudad de Nuevo Laredo, vivieron horas de pánico tras la fuerte tormenta que azotó en la comunidad, dejando numerosos daños materiales.
Calles inundadas, árboles caídos, vehículos dañados y la interrupción del servicio eléctrico fueron algunos daños que dejaron las largas horas de lluvias, granizadas, e intensas ráfagas de viento.
Enrique Rivas Cuéllar, alcalde de la ciudad, dirigió un mensaje por medio de sus redes sociales para alertar a los habitantes.
En este momento se presenta una tormenta atípica en la ciudad con caída de granizo y fuertes vientos que pueden afectar varias zonas. Estoy en comunicación con Dirección de Protección Civil y Bomberos para evaluar daños”
Especialistas señalaron que el fenómeno meteorológico puede considerarse atípico, debibo a la época del año.
Autoridades locales en coordinación con Protección Civil se encargaron de resguardar a la comunidad. Asimismo recomendaron a la población evitar zonas de riesgo.