El parque deportivo Beto Ávila fue testigo de un acto de amor, cuando Omar Daniel se hincó en medio del diamante para pedirle matrimonio a su pareja, Alma.
Fue durante la interrupción del juego por cuestiones técnicas, cuando la pareja descendió al campo y Omar Daniel, con un ramo de flores en una mano y en la otra el anillo, le pidió a Alma que se casara con él.
La respuesta de la dama fue positiva, por lo que todo el parque se levantó para ovacionar a los futuros esposos.