Tras la entrada en vigor de la reforma que sustituye al Seguro Popular con el recién creado Instituto Nacional de Salud para el Bienestar (Insabi), ocho gobernadores han rechazado la adopción del nuevo esquema de seguridad social para los no derechohabientes.
Se trata de siete de extracción panista y uno de Movimiento Ciudadano. Lo anterior, bajo el argumento de que el cambio carece de la planeación pertinente, además de que no da certidumbre a los beneficiarios del Seguro Popular respecto a la continuidad de los servicios que necesitan.
Además de que la autoridad federal eliminará el subsidio que destinaba al Seguro Popular, por lo que los sistemas de salud locales correrán a cargo de los gobiernos estatales.
Por ahora, se han opuesto a la medida 7 gobernadores del PAN:
1.- Martín Orozco, gobernador de Aguascalientes.
2.- Carlos Mendoza Davis, gobernador de Baja California Sur.
3.- Diego Sinhue, gobernador de Guanajuato.
4.- Francisco Domínguez, gobernador de Querétaro.
5.- Mauricio Vila, gobernador de Yucatán.
6.- José Rosas Aispuro, gobernador de Durango.
7.- Francisco García Cabeza de Vaca, gobernador de Tamaulipas.
Además, se unió a la lista el gobernador de Jalisco, Enrique Alfaro, quien proviene del partido Movimiento Ciudadano.
Este lunes, la Comisión Permanente Nacional del PAN, encabezada por el dirigente albiazul Marko Cortés Mendoza; el secretario general, Héctor Larios Córdova, y ocho de los 10 gobernadores de Acción Nacional en el país, “acordó cuidar la calidad de los servicios gratuitos de salud de los mexicanos más necesitados”, se precisa en un comunicado. “Para Acción Nacional la prioridad es preservar la gratuidad, la calidad y la cobertura de los servicios de salud y trabajaremos para que esto sea una realidad”.
Fuente: La Silla Rota